No está probado que la yema de huevo y la sal de Epsom alivien el dolor de rodillas

¿Sirve la yema de huevo para el dolor de rodilla?

“Un remedio natural para aliviar el dolor de rodillas y articulaciones”, así comienza un mensaje publicado en Facebook, que circula en Nigeria.

En la publicación se afirma que una mezcla de yema de huevo y sal de Epsom aliviará este dolor. Y se prosigue citando la información: “Bate la yema de huevo hasta obtener un líquido bastante fluido. A continuación, añade la sal de Epsom y mézclalo todo.

Aplicarás la mezcla en un algodón que colocarás en la zona adolorida y lo fijarás todo con la venda elástica. Déjalo actuar durante 2 horas. Puedes aplicar hasta 4 compresas al día y dejar”.

La sal de Epsom, también llamada sulfato de magnesio, es un compuesto químico de magnesio, azufre y oxígeno.

Es una sustancia cristalina amarga, incolora o blanca. Pero, ¿puede utilizarse esta combinación para tratar el dolor de rodilla o de las articulaciones? Pues no está científicamente probado.
El dolor de rodilla es una afección común.

Hay muchas causas, desde una lesión hasta algún tipo de artritis. La artritis es la inflamación de las articulaciones. Existen varios tratamientos médicos para el dolor de rodillas y articulaciones, dependiendo de la causa.

“Hace poco me topé con la afirmación, pero la ignoré. Para mí no tiene sentido”, dijo a Africa Check Chike Anibeze, profesor de anatomía de la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Enugu, en Nigeria.

Anibeze dijo que no había visto ninguna investigación sobre el tratamiento del dolor articular con yema de huevo y sal de Epsom.
“Los ingredientes no afectan al dolor de rodillas o de articulaciones. Mi consejo para cualquiera que luche contra este dolor es que visite a un médico. El médico tendrá que establecer la causa del dolor antes de prescribir un tratamiento”, aconseja el galeno.

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